nada ha cambiado en ti,
sigues siendo la misma serpiente
que solo cambia de piel,
llevas el veneno a donde vas,
intentas ser amable pero ya no te creo,
eres tan miserable o un poco mas que yo,
no sabes donde desperdiciar tu amor,
no sabes donde olvidar lo mucho que recuerdas,
me eres tan indiferente como ese perro
hambriento que vi el otro dia en la calle...
tus raices se secaron,
tu las secaste,
finges ser feliz,
pero tu y yo sabemos a que le tienes miedo,
a la soledad y al olvido,
pero vas a aprender a vivir asi,
con tu cuerpo de serpiente esbelta,
solo te van a desear y nunca a amar,
como el lucero de la tarde...
c. althieri
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